160 años de whisky medicinal H. McKenna

Cuando Henry McKenna, originario del condado de Derry, Irlanda, se instaló en el pueblo de Fairfield, condado de Nelson, Kentucky en 1851, estaba construyendo autopistas de peaje. Habiendo llegado a Estados Unidos a la edad de 18 años, llegó a Kentucky en 1838, donde fue contratista y constructor de autopistas. En Fairfield entró en un negocio de molienda. En 1855 comenzó la fabricación de whisky en un pequeño galpón conectado al molino, produciendo menos de un barril por día. Después de la guerra abandonó el negocio de la molienda y aumentó su producción a un barril por día. Su reputación de whisky fino y buen marketing dio lugar a la construcción de una nueva destilería de ladrillos en 1883. También se agregaron a los edificios más antiguos dos almacenes aduaneros, uno de piedra y otro de estructura de madera. El molde de ladrillos de madera que se utilizó para formar los ladrillos de arcilla local aún se conserva en la actualidad. Al formar tres ladrillos a la vez, también se utilizó para formar ladrillos para su propia casa y la iglesia católica St. Michaels construida en su propiedad cercana. 

En ese momento estaba produciendo seis barriles por día. También era dueño de una granja de 360 acres que pudo haber suministrado muchos de los granos necesarios para su negocio. A diferencia de otras destilerías, McKenna solo fabricaba “H. McKenna Old Line, Hand Made, Sour Mash Whisky ”, sin marcas privadas. Nunca vendió whisky para Bond hasta los tres años, lo que en ese momento se consideraba whisky añejo.  

Los hijos de McKenna, Daniel, Stafford y James, estaban involucrados en el negocio con Daniel administrando la destilería y James promocionando y vendiendo el producto. Daniel entró en la destilería cuando solo tenía ocho años en un momento en que vendían whisky a diez centavos el cuarto y veinticinco centavos el galón. A una edad temprana se convirtió en gerente y destilador junto con Patrick Sweeney, otro nativo del condado de Derry, Irlanda. Sweeney fue contratado como destilador en 1860 y continuó hasta su muerte. En la industria actual, Sweeney sería aclamado como un "maestro destilador" respetado en todo el país por su experiencia.  

James McKenna fue a Louisville en 1880 y abrió un negocio en Market Street, pero en un año se mudó a 245 Fourth Street, entre Main y Market, donde operaba como "Distribuidor de licores al por mayor y al por menor". Este negocio fue tan exitoso que los pedidos no se pudieron completar, por lo que en 1890 se vendió y se fue a la carretera para la empresa y en 1896 se convirtió en Asistente. Gerente general. En este momento, los almacenes podían contener 8000 barriles.

McKenna nunca olvidó su tierra natal y regresó tres veces durante sus años en Kentucky para visitar a amigos y familiares. Se casó con una chica irlandesa, contrató a un destilador de Irlanda, que también se casó con una chica irlandesa, por lo que era obvio que el símbolo del arpa irlandesa estaría grabado bajo su nombre en sus barriles.

El Whisky H. McKenna se comercializaba en todo el país y su gran pureza fue reconocida por un gran número de médicos que lo certificaron como el mejor para ser utilizado con fines medicinales. Estas letras se utilizaron para crear etiquetas para ciertas regiones que indicaban el nombre y la ubicación de estos médicos. En todos los anuncios y listados se señaló que era "Whisky antiguo para uso medicinal". Si estuviera enfermo, podría ir al gabinete a tomar una copa y también consultar la botella para ver la dirección del médico más cercano.

Henry McKenna murió en 1893. Siempre firmó con su nombre, en cheques, contratos y correspondencia privada, “H. McKenna”. Era un hombre cuya palabra era "... equivalente a un vínculo de borde dorado". Si le prometiera una botella o un barril de whisky puro, lo obtendría como se representa. Como hicieron otros fabricantes de whisky fino, poner su nombre en la etiqueta era poner en juego su reputación. Hoy en día muchos destiladores firman sus etiquetas como valor agregado a la venta, pero “H. McKenna ”fue reconocido como el fabricante de confianza sin ninguna firma adicional.   

La destilería H. McKenna continuó su producción hasta 1917. Después de 1919, todos los barriles fueron trasladados a un almacén en Louisville para ser embotellados para whisky medicinal. Después de la derogación de la prohibición, la destilería y los almacenes fueron reparados y fue el segundo en el condado en reanudar la producción en 1934. Los hijos de McKenna, Jim y Stafford McKenna, continuaron la operación. La familia vendió la destilería a Joseph E. Seagram & Son en 1941. A principios de la década de 1980, Seagram vendió la marca a Heaven Hill Distillery, que ahora ofrece con orgullo la marca "Henry McKenna" para su disfrute, medicinal y de otro tipo. Ciento sesenta años después, todavía "curando lo que te aflige".

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Una posdata de esta historia tuvo lugar el 7 de noviembre de 1996. Heaven Hill Distillery sufrió un desastroso incendio de 16 alarmas y se llamó a doce departamentos de bomberos. Siete almacenes y la destilería fueron destruidos, pero no se perdieron vidas. Esa noche estaba en la estación de bomberos de Bardstown tratando de ayudar con las llamadas telefónicas, la comida y otras necesidades cuando escuché a una mujer gritar: "¿Alguien sabe si Henry McKenna está herido?". Me di la vuelta y dije: “¿Qué? “Ella respondió que un hombre quería saber si Henry McKenna fue quemado. 

En este ambiente tenso y serio, tuve que reírme y le dije: "Henry McKenna murió hace cien años, pero si pregunta por su whisky favorito, dígale que estoy seguro de que queda algo". Henry McKenna se habría sentido orgulloso de saber que un caballero de un estado del medio oeste amaba tanto su whisky que quería estar seguro de que el gran whisky todavía estaba disponible para sus necesidades medicinales o de placer. Eso es lo que hay en un nombre.

Sobre Dixie Hibbs

Dixie Hibbs es una autora e historiadora que ha escrito 16 libros sobre historia regional;  Antes de la prohibición, destilerías en el condado de Nelson, Kentuckye historias pictóricas que incluyen fotos de la destilería de Borbón. Hibbs también escribió y pronunció una presentación titulada "Media pinta de historia del whisky y una dosis de humor" en un almuerzo con sabor a Bourbon durante ocho festivales de Kentucky Bourbon en Bardstown. Esta historia de los espíritus de Kentucky abarcó más de 203 años. 

Hibbs es la primera mujer incluida en el Salón de la Fama del Borbón de Kentucky, no por hacerla o venderla, sino por escribir y contar las historias que aportan mucho al sabor del espíritu. Hibbs fue honrada por la Asociación de Mujeres Borbónas como la ganadora del Premio Lois Mateus Networking en 2019 y fue incluida en la Orden del Auto.

Hibbs sirvió en el Concejo Municipal de Bardstown durante 19 años y fue Alcalde de la Capital Mundial de los Borbones durante cuatro años. Retirándose de la política en 2007, Hibbs continúa contribuyendo al apoyo de Bourbon escribiendo un recorrido digital a pie por Bardstown, "Whisky Walks and Bourbon Talks".